Esto, en conjunto con la imagen, está pensado como un monologo con lo femenino
Mírate! Al espejo ese que está al frente, sin confundirte en los colores de tu otra alma perdida ni los tonos de tus gestos ajenos.
Contémplate! Así como tu reflejo, podrás encontrar en ti las pertenencias vacías de un querer que no tienen destino.
Obsérvate! Como los momentos que pasan, quizás inadvertidos o insignificantes, y que vierten sobre tu piel sus sabores y tiñen con sus olores.
¿Ves la ceguera del espíritu de Narciso que se hace presente en nuestros reflejos cotidianos?
¿No te reconoces en tus deseos, vacilando ante la propia mirada extrañada
¿Otorgarás al tiempo el rastro de su paso?