Esta nota o poema que hice a petición personal para la hija de una amiga que se va a casar en tierras lejanas (francia) y que espera decirle algunas bellas lineas para desearles felicidad.
Con el anillo se embarcan ahora en un viaje mutuo, desde un lugar por sus gestos, sus deseos y sus pensamientos. Se dejan fundir uno al otro en una selva verde y frondosa de lo cotidiano, esperando con ansias y alegría, marearse en el carrusel de sus dos mundos.
Se embriagan deleitandose en los pequeños gestos que llenan su nido de mutuo amor.
Trazan así nuevos caminos juntos, surcando los cielos como Hermes, llevando en sus corazones un aliento de complicidad.
Así en esta nueva entidad de dos ángeles, se fortalece el amor en la entrega mutua y hace que los susurros al oído sean un encuentro de almas en el día a día.
Trazan así nuevos caminos juntos, surcando los cielos como Hermes, llevando en sus corazones un aliento de complicidad.
Así en esta nueva entidad de dos ángeles, se fortalece el amor en la entrega mutua y hace que los susurros al oído sean un encuentro de almas en el día a día.
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